La travesura va en aumento mientras crece, directamente proporcional a sus avances y estrategias.
Ahora se le ha dado por “no comer”, así sencillamente, de un día a otro dejó de gustarle la comida y se niega rotundamente a abrir la boca; pero aún así intento darle esos suplementos que contienen soya, eso se convierte en tarea imposible, no en misión imposible porque hasta en la película se logra cumplir la misión, aquí no.
Y resulta que sus escondrijos ahora son sus prendas de vestir, especialmente los zapatos. Yo estaba contenta porque de pronto desaparecieron un par de uvas y otros trozos de fruta. “Al fin comió algo”, me dije, pero cuando quise ponerle los zapatitos que se había sacado, la comida salió victoriosa de su escondite.
Me dicen que así mismo es con los niños, que tienen etapas en las que no quieren comer, aunque la verdadera alegría para las madres es ver que sus adorados hijitos se coman toda su comida.
Ahora se le ha dado por “no comer”, así sencillamente, de un día a otro dejó de gustarle la comida y se niega rotundamente a abrir la boca; pero aún así intento darle esos suplementos que contienen soya, eso se convierte en tarea imposible, no en misión imposible porque hasta en la película se logra cumplir la misión, aquí no.
Y resulta que sus escondrijos ahora son sus prendas de vestir, especialmente los zapatos. Yo estaba contenta porque de pronto desaparecieron un par de uvas y otros trozos de fruta. “Al fin comió algo”, me dije, pero cuando quise ponerle los zapatitos que se había sacado, la comida salió victoriosa de su escondite.
Me dicen que así mismo es con los niños, que tienen etapas en las que no quieren comer, aunque la verdadera alegría para las madres es ver que sus adorados hijitos se coman toda su comida.
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